Para la astrología, personifica comienzos, el deseo como poder, fuerza, valores, mando. Si juega va por el puesto uno. Aventurera, carismática, atrevida y libre. Con Marte como su regente, no podría ser otra cosa que auténtica, independiente y de temperamento algo elevado. Su vehemencia atrae aunque no se quiera y su naturaleza es seductora. Apasionada. Ambiciosa. Rebelde.
¿Te deslumbra una ariana? ¿Tenés la adrenalina necesaria para seguirle el ritmo? Este es una píldora, en lo que sigue vas a descubrir cómo es una de las damas más especiales del zodiaco. Qué la hace vibrar, ¿antepone el amor o no?, cómo se lleva con el dinero, ¿y con su talento? Para saber cómo llevarla necesitás primero leer estas líneas, luego, la tomas o la dejas.
Su día inicia ideal para ir por lo que quiere y no obligar a nadie a seguirla. Cómoda en caminar con rumbo y muy creativa. La mujer ariana se pone metas y va por ellas, en lo profesional y en lo personal. Cuando se trata de defender lo que cree justo no hay quien la frene, por eso, suele levantar la voz si es necesario y fijar posición, aunque moleste y suene a ego. En lo íntimo, es como su elemento: fuego, y es su gran arma. Rara vez frena. Arriesgada.
La conquista la puede más que la pareja misma, algo que la hace más tentadora. La hembra ariana nació para disfrutar la seducción, una que genera naturalmente. Cuando se trata de romance siempre avanzará antes y dirá lo que siente sin pensárselo mucho, y, aunque no se comprometerá pronto, es fiel. Con ella las relaciones deben ser entusiasmo y hormonas, a la par de inteligencia, si no, no van. ¿Te interesa? Dejale llevar el ritmo, pero satisfacela. Un carnero lidera, siempre.
Dos fuegos juntos son dinamita, por eso una ariana se dejará seducir con un hombre par. Aunque el problema estará en los egos. Compiten por naturaleza y por eso no compatibilizan bien. Pasión y chispas por dominar.
Se equilibran. Ella cederá a la calma y humor del taurino, mientras él se cautiva por su sentido del riesgo y la emoción. El sentido materialista los une. Cuidado Tauro de no estancarte, ella se hastía.
El fuego de la pasión acá no se enciende tanto, pero en conversar conectan excelente. Innovar los saca de lo cotidiano. Comparten intereses y gustos. Más amigos que pareja.
Incompatibles. La ariana irá por todo siempre, y eso no cuadra con el comportamiento hasta melancólico del cangrejo sensible que ni siquiera le discutirá. Lejos de la aventura, este querrá solo seguridad. No funcionan.
Fuego y fuego. En lo físico, en lo mental, en lo material y en lo espiritual conectan profundo. Atracción inmediata, vida social fresca y algunos choques impulsivos. Se admiran. Duran juntos. Lo disfrutan.
Opuesto casi por completo en el amor y las relaciones, mucho mejor en lo laboral. Aries extrovertida y el virginal más retraido, no funcionan por personalidad.
Diferentes, pero se atraen. Ella gustará de un libriano caballero, aunque algo afeminado para su tipo de gusto, y este la verá demasiado sincera. La relación puede empezar por pura casualidad. Puede funcionar.
La pasión en todo sentido los mueve. Atracción sexual alta. Actúan casi sin pensar. Pero difieren mucho en las personalidades. Marte y Saturno. La ariana es como es, mientras él es más complejo.
Una de las compatibilidades más elevadas para la ariana. Dos fuegos no podían ser menos. Emoción, seducción pura y aventura desde un inicio. Libertad, diálogo y cambios necesarios los consolidan. Buenos en los negocios y dinámicos. Ojo con poseer. Duran.
La mujer ariana difiere bastante de un macho cabra lento y austero, aunque venera su lado leal. Ella quiere emoción, es caprichosa y más ansiosa por naturaleza. Él adora lo que es junto a ella. Poco y nada.
Como amigos serían infinitos. Diversión y salidas. Él piensa y ella llega a la acción. En cambio, en pareja no tanto. Son demás independientes, y eso atenta un poco contra la fogosidad y el romanticismo, pero el ideal materialista los junta. Durarían mejor si se rodean de otros.
Fuego y agua, casi no compatibilizan. Aunque se miren y pueda existir una aventura casi oculta y sensual, a la corta no hay nada sólido entre ellos que los una. Sensibilidad extrema y huida de él frente al autoritarismo innato de ella. No se comprenden.
Cuando la acuariana decide formar su nido, es de lo más comprometida, además de eficiente. No se cansará de hacer todo lo que esté a su alcance por ellos y así y todo dedicarle espacio a su pareja. Claro que, como buen dual, no cesará si se enoja y eso desequilibrará la vida de a dos.
Como mamá es aplicada, cercana y ordenada. Les mostrará el mundo a su manera, y su cerebro innovador será inspiración para ellos.
Hay que decirlo, la ariana no llegará rápido a este punto. Pero cuando lo hace, pone todo en ello y espera lo mismo: pasión. Casada es amorosa, compañera y busca que el día a día sea fresco y aventurero. Al ser líder, como madre será ejemplo de sus peques. Emprendedora, luchadora y consejera de los suyos.
Como sus rasgos, una amiga ariana será transparente, muy sincera y compinche, mucho más cuando todo se pone difícil, pero dejando espacio. No esperes que esté encima ni ponga ella sola, querrá que sus pares persigan vivir experiencias novedosas y salirse de lo común. Como va al frente, la oirás. Da energía positiva al resto y eso gusta.
Ya no asombra decir que la ariana por sus cualidades innatas está creada para una profesión o trabajo en el que pueda brillar. Ambición, liderazgo y ganas, la llevan a lograrlo. No será alguien que no se note, ella va más allá de lo básico. Le van ideal los puestos donde puede expresar su talento, al resto le rehuirá.